Como bien dices, “sigue siendo la red social favorita de los millennials”, y doy fe de ello porque lo soy y me encanta. Es verdad que hay elementos que mencionas, como por ejemplo, la duración de las historias de Instagram, que no superan las veinticuatro horas, y a decir verdad, creo que estaría bien que ese tiempo se incrementara porque a veces un “contenido fugaz” termina siendo más llamativo que una publicación y la pena es que su paso por la red sea tan efímero que los usuarios se lo acaben perdiendo por motivos de trabajo, estudios o determinados quehaceres.
Otro punto a destacar es que antes recomendaban agregar muchísimas etiquetas para una mayor visibilidad y ahora la tendencia se inclina hacia lo contrario. ¿Crees que puede deberse a una forma de evitar la competitividad agresiva o más bien es una manera de demostrar que existen diversas maneras de atraer a potenciales clientes sin depender de los hashtags?
También me he dado cuenta leyendo los porcentajes que las mujeres suelen hacer uso de esta red incluso más que los hombres, aunque en parte es normal porque muchas se sienten conectadas a sus influencers favoritas, por ende, repercute de forma positiva tanto para ellas como clientes como para las empresas que venden servicios y/o productos en las redes.
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Aquest és un espai de treball personal d'un/a estudiant de la Universitat Oberta de Catalunya. Qualsevol contingut publicat en aquest espai és responsabilitat del seu autor/a.
Muy buenas, Dúnia.
Como bien dices, “sigue siendo la red social favorita de los millennials”, y doy fe de ello porque lo soy y me encanta. Es verdad que hay elementos que mencionas, como por ejemplo, la duración de las historias de Instagram, que no superan las veinticuatro horas, y a decir verdad, creo que estaría bien que ese tiempo se incrementara porque a veces un “contenido fugaz” termina siendo más llamativo que una publicación y la pena es que su paso por la red sea tan efímero que los usuarios se lo acaben perdiendo por motivos de trabajo, estudios o determinados quehaceres.
Otro punto a destacar es que antes recomendaban agregar muchísimas etiquetas para una mayor visibilidad y ahora la tendencia se inclina hacia lo contrario. ¿Crees que puede deberse a una forma de evitar la competitividad agresiva o más bien es una manera de demostrar que existen diversas maneras de atraer a potenciales clientes sin depender de los hashtags?
También me he dado cuenta leyendo los porcentajes que las mujeres suelen hacer uso de esta red incluso más que los hombres, aunque en parte es normal porque muchas se sienten conectadas a sus influencers favoritas, por ende, repercute de forma positiva tanto para ellas como clientes como para las empresas que venden servicios y/o productos en las redes.
¡Enhorabuena por tu trabajo!
Un saludo.
¡Enhorabuena por tu trabajo!*. La tilde no procedía en este caso, pero al escribir deprisa, ni me di cuenta y cometí este fallo ortográfico. Disculpa.
¡Enhorabuena por tu trabajo!*. La tilde no procedió en este caso, pero al escribir deprisa, ni me di cuenta y cometí este fallo ortográfico. Disculpa.